Una vez en la vida

Cuántas veces he escuchado eso de “hay trenes que solamente pasan una vez en la vida”. Me pregunto entonces… ¿cuántos habré dejado pasar? De forma consciente o inconsciente, no creo que fuese capaz de decir una cifra concreta.

El dicho más que conocido, que las oportunidades pasan una vez y hay que aprovecharlas. Pero, ¿y si no estás preparado? ¿Y si ni si quiera sabes que es una oportunidad porque no la ves? ¿Y si…?

¡Ahí está! ¿Cómo iba a ver la oportunidad que tenía delante? Yo fijándome en trenes, cuando la oportunidad para mí… ¡era un barco! Y es que nos pasamos tanto tiempo observando lo convencional, lo que la sociedad nos dicta, lo que creemos que es “normal”, que nos perdemos nosotros y lo que realmente es valioso.

Hasta que no entendamos que todos somos distintos y que tenemos una forma propia y genuina de ver la vida…seguiremos de pie en la estación equivocada, en la puerta de embarque errónea, en la línea de metro circular o en la carretera cerrada por obras de mantenimiento en la calzada.

[Giré la esquina y observé a través del inmenso ventanal que rodeaba la cafetería. Allí estaba él, con la mirada en la pantalla del teléfono, media sonrisa en los labios y el pelo despeinado. Fue entonces cuando lo sentí…algo cambió en el mundo. La cháchara mental se quedó muda de golpe y el resto de mi cuerpo avanzó al son del 'pum-pum' de los latidos.]


Siempre,

Dai*

P.D: Dedicado a quienes ya no están conmigo, pero son eternos. En especial a él, a mi infinito. (Porque no hay día en que no te eche de menos).

[Suena: Thirty Seconds to Mars - "Walk on water"]

Entradas populares de este blog

Como respirar

Sutileza del copón

Con ritmo propio