¿Qué te mueve a ti?
Las ráfagas de optimismo son las mejores para mover nuestras velas con más rapidez o para darle seguridad a nuestras alas durante el vuelo. ¿Un ejemplo? Que suene el despertador un lunes muy temprano y en lugar de remolonear, salte disparada como un resorte para empezar el día con ganas…con muchas ganas. Considerar que hay algo más allá de las limitaciones que nos hemos puesto nosotros mismos no es tarea fácil, pero cuando se da el primer paso todo parece menos imposible. Obviamente hay factores que nos afectan directamente, tanto para frenarnos como para impulsarnos. A mí me mueven muchas cosas, algunas de manera tan intensa que me provocan vértigo… un subidón de adrenalina de esos placenteros. Un consejo en el momento adecuado, un sentimiento que se escapa de los labios, una palabra de ánimo, una canción en acústico, la magia de una sonrisa, el beso de una mirada, el pellizco de una ironía o la caricia de un guiño. ¿Qué te mueve a ti? [ Ha vuelto a notar el pá