Tu recuerdo en mi almohada

Se acaba una semana…y otra nueva vuelve a empezar. Y así sucesivamente semana tras semana, aunque últimamente me han parecido más largas y más raras que de costumbre. 

Quizá sea su ausencia que sigue presente, o el no saber lo que parece que ya se sabe, pero que continúa todavía en el aire. Quizá sea el recuerdo imborrable de su presencia como una chispa que electrifica y te sacude a modo de recordatorio repetitivo.

[Y dijo él: “¿Te puedo hacer una pregunta?”]

Quizá sea mi estupidez por intentar tocar las nubes con los dedos, incluso poniéndome de puntillas. Quizá sea la fe o el creer en algunas personas que piensas que te sostendrán para que seas capaz de llegar a las nubes.

[Y dijo ella: “Claro”]

En cualquier caso, sea lo que sea y sea como sea, se ha convertido en un pensamiento recurrente, en una caricia continua en mis manos, en un tatuaje permanente en mis labios, en un suspiro que juega enredando sus dedos en mi pelo …y en una duda constante en mi mente.

[…Cada vez que ella apoya la cabeza en su almohada, cierra los ojos un instante, los vuelve a abrir…y ahí está él, mirándola al otro lado de la almohada sin sus gafas, con esos ojitos brillantes que parecen sonreír. Vuelve a besarla una vez más, la abraza y se vuelve a dormir. La misma secuencia de aquella noche se repite en la mente de ella todas las noches desde entonces, sin que sea capaz de evitarlo…]

Siempre,

Day*

P.D: Dedicado a los que todavía son capaces de irse a dormir soñando despiertos (me parece que el proyecto del libro al final acabará escrito).

[Suena: 3doors down - Weakness]