Reajustando mi brújula

A veces hay que dar un paso adelante para confirmar las sospechas. Otras veces hay que cruzar un océano...y así puedo decir que a pesar de lo que la gente me haya dicho en el pasado, sin duda lo que estoy viviendo aquí y ahora es lo que me imaginé y mucho más.

En el mundo hay personas realmente maravillosas, personas que te ayudan a crecer y te colman de cosas buenas que hacen que te sientas afortunado/a. Me siento inmensamente feliz y bendecida por haber encontrado en este momento en mi camino a gente que está dejando huella en mi vida y espero que sigan en ella para siempre. 

Lo mejor de todo es que a pesar de los rascacielos, las luces de neón, las avenidas interminables, las casas de ensueño y un largo etcétera, la esencia de cada persona permanece intacta (incluso la mía, en contra de lo que algunos puedan pensar). Porque aunque todo me maraville, creo que sé usarlo a mi favor para disfrutarlo al máximo y sacarle partido a todos y cada uno de los instantes que me está regalando este verano inolvidable. 

Y mientras siguen surgiendo sensaciones contradictorias que se debaten entre el ir y venir, voy a dejarme llevar un poco más mientras las estrellas sigan brillando junto a mis pasos. 

[Despertarse se había convertido en algo nuevo y divertido. Mirar por la ventana y ver el jardín, el buzón del vecino, una bandera y una hilera de casitas calle abajo era el marco perfecto para cada desayuno. Y mientras bebía otro sorbo de café, un mensaje en el móvil llamó su atención: "Déjate llevar aunque no sepas tu destino, porque tenemos toda la vida para tener los pies en el suelo, pero sólo este momento para mantenerlos en el cielo". Y pensó: los anuncios de cocacola a veces son una buena lección de filosofía"]

Siempre,

Day*

P.D: Dedicado a la familia Sher (tres generaciones de mujeres sensacionales).

[Suena: The Corrs and U2 - When the stars go blue]