Días de viento

Los días de viento parece que tienen una esencia especial. Una parte de mí odia el dolor de cabeza y mi pelo alborotado todo el tiempo, mientras que la otra se siente extrañamente inspirada por esa “esencia”, ese no sé qué.

Es como si se creara un paréntesis invisible en el que detenerse y dejar que la imaginación haga de las suyas. Y mientras esto sucede, se siente el aire frío en la piel al mismo tiempo que mis ojos curiosos observan las nubes que viajan sin detenerse, dibujando a su paso formas variadas en una gama cromática que va de azules a grises (no hace falta que diga que la música suena en los auriculares del teléfono, creo que eso ya os lo podéis imaginar a estas alturas).

Voy a aprovechar lo atípico del tiempo a mi favor, por disfrutar de la vida un poquito más de lo que ya lo hago cada día. ¡Menuda semana se presenta! Sed felices todo lo que podáis…y más.

[Ella seguía garabateando en su libreta roja. Tenía tantas ideas simultáneas que no sabía cual escribir primero. Quizá por ello decidió esperar a que sus pensamientos se detuvieran para poder comenzar con buena línea desde el primer renglón. Y así empezó todo.]

Siempre, 

Day* 

P.D: Dedicado a los que leen estas líneas, porque el tiempo es un bien preciado y es un honor que invirtáis tres minutos del vuestro en leer las cosas que pasan por mi cabeza (más o menos descabelladas, más o menos ambiguas, más o menos aburridas, pero siempre sinceras). Gracias :)

[Suena: Seether - Tonight]